Ha habido varios intentos fallidos. Primero, Pierrot le Fou en ingles, con un destilado ochentero acento ingles que hacia a Jean-Paul Belmondo parecer cualquier cosa menos frances, cualquier cosa menos el. Luego Centre Stage sin subtitulos, venga a apretar botones y nada, al final sucumbi al desesperado intento de verla en cantones…adivinaron.
Me dispongo pues (que remedio, que desesperacion!) a ver una peli en ingles, que de esas tambien tengo. Con la mala suerte de encontrar The life aquatic of Steve Zissou , bodrio descomunal que pretende parodiar el arte del documental marino, aparentemente basado en la vida de Jacques Cousteau… infumable.
Me encanta el cine japones, por el estilismo, la cinematografia…aunque hay que tener paciencia con las tomas de la gotita de agua cayendo interminablemente… ningun otro cine nacional es tan estiloso y sutil. (Huy si, me olvidaba de Paz Encina y su Hamaca Paraguaya, el colmo del minimalismo e inspirado en …tachan..Ozu!)
El otro dia me trague Sex & Fury, (Furyô anego den, Inoshika Ocho, 1973) y he de reconocer que lo pase pipa con los tatuajes, las peleas y la heroina desnudandose a la minima oportunidad (hay una escena en la que lucha con 40 tipos y se va quitando el kimono mientras corta brazos con un arte que no veas) y al final lo vi claro: debe de ser la peli fetiche de Tarantino, porque desde la historia (nina pierde a su padre asesinado y dedica su vida a capturar a los malos), pasando por el uso de la musica, las escenas de miembros cercenados y (atencion!) el momento final en la tormenta de nieve, todo recuerda a Kill Bill. En fin, todos tenemos nuestras influencias.
Que feliz verano, que cinematico, que com-ple-to.
1 comentario:
déjame: babeo y luego me voy tan feliz. :)
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